Ricardo Andrés Cárdenas Pedroza
Sexo: Masculino.
Edad al momento del desastre: 5 años .
Quién lo busca: Hilda Pedroza
Historia
Ricardo Andrés Cárdenas Pedroza nació el 10 de diciembre de 1979; hijo de Jaime Cárdenas e Hilda Pedroza; desapareció el 13 de noviembre de 1985 tras la avalancha que arrasó con Armero. Ricardo Andrés y su madre huyeron despavoridos en medio del caos que se produjo cuando la avalancha llegó a Armero; en medio de la oscuridad que lo cubría todo, los dos se cogían de la mano, y Ricardo sobrecogido por el pánico, apretaba la mano de su madre para que supiera que seguía con vida. Sin embargo, en medio de un camino incierto, Hilda sintió como alguien le arrebata a su hijo: “Tranquila señora, yo lo tengo, ya lo cogí”, un hombre le gritó. Hilda pensó que su hijo estaría más seguro, sin embargo, no sabía que ese momento sería la última vez que sabría de él. Desde ese angustioso y nefasto momento, Hilda y su esposo buscan desesperadamente a Ricardo Andrés, tuvieron diferentes pistas y testimonios que decían que su hijo se encontraba vivo; no obstante, la llama esperanzadora que se encendía con cada pista se extinguía al no encontrar su paradero. El domingo 18 de noviembre a través de RCN, alguien llama diciendo que tiene al niño y que esta bien. En otro resumen noticioso se ve al niño en poder de socorristas siendo la prueba de los padres de que su hijo se encuentra con vida. Otros atestiguaron haberlo visto tomando gaseosa con dos personas que aseguraban ser sus abuelos. En otra ocasión una llamada de la Presidencia de la República pedía que algún familiar lo recogiera en Lérida o Cambao, su familia se fue tras él y al llegar se encontró con que todo era mentira. La última noticia que se tuvo fue que el niño se encontraba estudiando en Neiva, y que ahora portaba otro nombre, sin embargo, el niño fue retirado y desapareció de nuevo su rastro. Los padres de Ricardo Andrés siguen soñando con ver a su hijo otra vez, quien para la fecha (2018) debe tener 39 años.
Ricardo Andrés es descrito por sus padres como vivaracho y pícaro, de ojos color café y piel trigueña. Entre las señales particulares están: cicatriz por operación inguinal, operación de amígdalas y una mancha en la pierna derecha debajo de la rodilla.